¿Qué podrás hacer contra Fenrir...? {Alex}

Recuerdo del primer mensaje :

Ya habían pasado varios días desde lo ocurrido con Alyss, ese hecho había sido mítico, había conocido a mi espada, bueno, a su alma... Por fin podía utilizarla con total libertad, solo tenía que aprender a controlar su poder, solo.... Solo tenía que aprender a usarla como era debido.
Caminé por los pasillos con la espada envainada, buscando la salida más rápida para llegar al bosque, quizás algún centauro querría practicar conmigo.
Un olor llegó a mi, un olor frío, y estirado... Alexander... Mi último encuentro con él fue muy movido. La verdad, según me pareció, estaba muy contento con su trabajo, pero en aquella ocasión, no podía ser verdad lo que decía Fenrir, no podía ser verdad. No podía haberme salvado una espada, pero... El hecho de verlo completamente materializado me hacía pensar que no podía mentirme, era como parte de mi alma en él... No lo entendía todavía, ¿Cómo había entrado en mi mente?
Seguí el camino del pasillo hasta encontrarme con Alex, al verlo sonreí divertido. Siempre llevaba la misma cara, siempre parecía dispuesto a divertirse con cualquier cosa. Y esta tarde era perfecta para practicar con él.
- Aburrido, verdad?- Pregunté parándome en su camino.

El campo de Quidditch ya se alzaba a unos metros, no había nadie entrenando, genial, no quería que me molestaran con mis heridas. Una ligera risa se me escapó de los labios al escuchar lo de Alyss.
- No, lo primero, es que no estoy preparado aún para una relación de verdad.- Confesé caminando por el sendero.- Y lo segundo, sí, Alyss es genial, pero... No sabría como decírtelo, supongo que la veo más como una hermana que como otra cosa. Con Chiara... La verdad, no entiendo a esa chica... Creo que mejor no intentar nada de verdad con ella...
Pronto pisamos el terreno de juego, donde nos habíamos conocido, fue un encuentro un tanto... conflictivo, pero no me importaba, al parecer habían reparado las gradas, como si nunca se hubiera estrellado allí nadie... ¿Habrían echado ya al boggart? No me apetecía ver de nuevo a mi madre así... Aún que... Últimamente creía que no era lo que más temía. Me metí en los vestuarios de uno de los lados, y fui directo hacia un banco, para dejar allí las pociones. Sin molestarme que estuviera allí Alexander, me bajé los pantalones con cuidado, hasta llegar a la herida, y me senté en la madera, alcanzando la poción para quemaduras, la herida no se había cerrado completamente, y dolía. Dejé car el líquido transparente, que humeó contra la carne. A los segundos, comenzó a cerrarse, sin dejar marca.

Vi com sus heridas comenzaban a cerrarse, y observe los frascos con curiosidad, ¿Cual de ellos serviria para curar un corte?, la verdad es que no tenia la menor idea de como curarme, simplemente esa no es mi especialidad.
- ¿Relacion de verdad? - repeti algo confuso, eran termino a los que simplemente no estaba costumbrado - No era a lo que me referia... - dije, dudando de mis propias palabras.
- ¿Como es eso de una relacion de verdad? - pregunte, con genuina curiosidad, todo esto de las relaciones interpersonales era nuevo para mi.
Segui jugueteando con los liquidos, aun no sabia cual seria el correcto para mi...

-Es el de la etiqueta verde, hace que las plaquetas se agrupen con rapidez y las células se reproduzcan .- Indiqué al ver que no sabía escoger muy bien.- He pasado los últimos cinco años una vez al menos en la enfermería, podría curar a los jugadores de Quidditch y los que se llevan golpes o heridas superficiales tan bien como la señora Pomfrey, es lo que tiene ser licántropo... Te despiertas lleno de heridas.- Reí silenciosamente tapando el frasco de quemaduras y poniéndome de nuevo el pantalón. Me desabroché la camisa para ver bien la herida, la verdad, no sabía que usar contra esto, irradiaba magia oscura.- ¿Habías dicho que sabía un hechizo para curar esto?.- Pregunté mirándolo tras quitarme completamente la camisa maltrecha. Saqué la varita negra que llevaba siempre conmigo y apunté a esta.- Fregotego. Reparo.
La camisa quedó como nueva, miré a Alex pensándolo, la verdad, no sabía mucho sobre Chiara, por eso no quería una relación seria con ella.
- Pues supongo que una relación seria se define como los sentimientos mutuos de afecto, y lealtad entre dos personas, cuando ambos se quieren, y tienen confianza plena en el otro... O eso creo...- Expliqué tras guardar mi varita.- Pero no me hagas mucho caso, no tengo experiencia con las chicas...

Sujete entre mis manos el frasco que Dave me indico, bastaron solo unas gotas para que mi herida comenzara a cicatrizar como si hubiesen pasado semanas, maldije una vez más la facilidad que tenia la magia para curar, le quitaba la diversion a muchas cosas.
- Claro que lo se, aunque lo he usado con menos regularidad que el ataque mismo - dije con media sonrisa, mientras camiaba hacia el, acerque mi varita a su herida, y la deje deslizarse sobre ella.
- Vulnera sanentum - dije, con la primera pasada, la herida dejo de sangrar, regrese la varita hasta arriba del corte, y repeti la accion dos veces más, con mi tercera conjuracion, quedo en su piel solo una fina linea de piel rosa y tirante.
- Ahora un poco de dctamo evitara que te quede la cicatriz - le dije con naturalidad, era e unico tipo de heridas que sabia curar, pues era el que causaba con más frecuencia, mientras, sentía como mi herida ya estaba casi sanada gracias a la poción que Dave me indico.
- Eso de las relaciones - dije, duditativo - suena complicado - recorde a Soph en ese momento, la chica me atraia mucho, como no me habia atraido una chica nunca antes, ¿pero queria una relacion?, simplemente me costaba imaginarme a mi en una situacion asi, decidi alejar la idea por ahora, simplemente me concentraria en el beso que buscaba conseguir, al menos por ahora, más adelante veria como se daban las cosas.
- No creo que tengas menos experiencia que yo - dije mientras reia un poco, habia perdido la cuenta con cuantas chicas me habia acostado, pero jamas habia estado ni cerca de tener una relacion de verdad.

Agradecí con una sonrisa la ayuda de Alex y volví a ponerme la camisa y me quedé sentado en el banco de madera, con un pie en el suelo y otro sobre la tabla, miré al suelo, la verdad, esto de hablar sobre relaciones no lo había hecho nunca.
- Sí, la verdad es que suena a complicado, será mejor esperar un poco antes de intentar nada...- Dirigí mi vista a Alex, sonriendo, la verdad, no tenía ni idea de con quién hablaba, apenas había besado a una chica, no había tenido nunca un trato con ellas que no fuera amistad, y tan solo con Helena, por que la conocía desde siempre, pero... Solía llevarme mejor con los chicos, o con los profesores, estaba deseando empezar las clases...
- ¿Qué materias dabas en tu país natal?- Por sus rasgos físicos se notaba que no pertenecía a Reino nido, al igual que por su nombre.- ¿Cuál era tu favorita?
Quería saber todo sobre la educación en su país, si era mejor que aquí, era posible que me marchase a ese colegio, aunque no quería dejar Hogwarts ni a mis amigos... No, mejor sería quedarme aquí, por mucho mejor que fuera su escuela, por primera vez en mi vida, había hecho varios amigos, y no quería perderlos así como así.
- ¿En qué trabajan tus padres?- Pregunté curioso, la verdad, no sabía ni siquiera si vivía con sus padres, pero así mataría dos pájaros de un tiro.

Aquellas eran muchas preguntas juntas, sonrei ante su curiosidad, ¿esta era una conversacion de amigos?, algo nuevo para mi, pero al fin y al cabo, era algo agradable, aquella idea me hizo reir.
- Quien lo hubiese credo... - dije para mi, mientras me sente, frente a Dave, para comenzar a contestar.
- Pues teniamos electivas y obligatorias, teniamos... - comence a hacer memoria - Pociones, Transformaciones, Artes oscuras, Historia de la magia, Maldiciones y Encantamientos, Criaturas oscuras, y... No recuerdo el resto -dije con sinceridad, mi precaria atencion a las clases me jugaba en contra una vez más - Mi favorita era artes oscuras, y maldiciones y encantamientos.
Me quite la camiseta y observe el corte que tenia, su espada era realmnte afilada, con mi varita repare el daño.
- Mi padre trabaja en el departamento de cooperación internacional del gobierno central magico de Rusia.
Busque su mirada ahora, con semblante relajado.
- ¿Que hay de ti?, ¿Cual es tu historia, y la de esa curiosa espada?

Escuché atento sus palabras, entonces por eso era que sabía hacer a la perfección el hechizo sectumsempra, y también que supiera el antídoto para la herida incurable. Pensé un momento en criaturas oscuras... Seguramente estdiarían a fondo las criatras que dimos en Defensa Contra las Artes Oscuras. Seguía prefiriendo transformaciones o encantamientos, me gustaba más Hogwarts. Respiré hondo y miré a Alex, si quería saber se lo contaría.
- Mis padres trabajan en asuntos "secretos", no están de parte de ministerio, la verdad, no les gusta las medidas que toman, es tal el saltarse las reglas, que no han querido quitar el hechizo protector de casa... Bueno, te explico, mi familia ha sido siempre de Escocia, desde hace milenios, defendían un pequeño castillo de trols y gigantes antaño, con espadas y varitas, hoy en día es la vivienda de tres adultos humanos, dos licántropos, y un elfo doméstico al cual liberé yo, y mi padre tiene que pagar mensualmente. El castillo cuenta con magia arcana, está protegido de la vista de muggles y magos, solo puedes entrar con el permiso de un Wishe, es como ese hechizo en el que se necesita un confidente, que sepa el lugar de la casa, y solo él pueda revelarlo, no recuerdo como se llama. Bueno, a parte de eso, también está protegido contra el rastreador del ministerio, esto vuelve loco al ministro de magia, pero con tantas donaciones que han hecho mis padres, lo dejan pasar. Respecto a la espada, fue forjada hace muchísimo tiempo, en su interior nació un alma de lobo, que está ligado a la sangre Wishe, obedece todas las órdenes que uno de esta familia le proponga.

¿Una espada con un espíritu atada a ella?, aquello escapaba, por mucho, de la magia a la que estaba acostumbrado, pero me parecia sumamente interesante, magia sobre los espiritus.
- Parece que tu familia tiene un pasado interesante - le dije, mientras sentia crecer mi curiosidad sobre su espada, mis ojos buscaron su espada, pero no la encontre, solo entonces recorde que habia desaparecido de sus manos nada más terminar el duelo, otra habilidad curiosa que tenia - En mi familia solo tenemos a una persona conocida, y lo fue por sus incurciones en la nigromancia y la magia negra - dije divertido, mientras jugueteaba con mi daga entre mis ropas.

¿Un pasado interesante?... Nunca lo había pensado así, para mi era una familia normal, bueno, la verdad es que de normal tenía poco, a ver... Solo tenía que hacer un recuento: Era un alumno de procedencia escocesa, por lo que ya dejaba de ser normal como los demás que solían ser de Inglaterra, era un licántropo, otra cosa para el saco; tenía una espada legendaria en mi poder, ¡más leña al fuego!
- Pues yo creo que somos muy normales...- Bromeé riendo.
Alcé una ceja mirando hacia Alex... Así que... Magia negra, mi familia nunca se había basado en magia negra o blanca, simplemente eran neutrales, no estaban en ningún bando.
- ¿Puedo oír la historia de ese familiar tuyo?- Pregunté con curiosidad.